Aún no ha marcado un solo gol desde que en el mercado invernal el Chelsea pagara casi 70 millones de euros por su contratación. Pese a ello, Fernando Torres sigue siendo el punta, el estilete y la referencia ofensiva del ataque del equipo londinense. El español no ha encontrado su lugar y no se le ve en su mejor estado físico, lo que para los medios representa un ejemplo del poder del dueño Blue, un Roman Abramovich que ejercería presión sobre Carlo Ancelotti para que siga siendo titular.
Y es que el precio del español fue tan alto y gusta tanto al magnate ruso, que su deseo principal es poder verlo triunfar en Stamford Bridge. Manejando esas hipótesis, Ancelotti ha tenido que moverse con discreción y ante la ausencia de goles, sus preguntas han sido capa vez más estrictas. La persecución al ex del Liverpool ya ha iniciado su proceso y, para aligerar problemas o no, lo cierto es que Ancelotti niega que reciba órdenes de arriba.
"Hay mucha competencia en la delantera. Es mi trabajo elegir el mejor once de inicio y no creo que el dinero que ha pagado el club por los jugadores tenga nada que ver. Roman Abramovich es inteligente y nunca me pediría que haga esto. No juzgo a un jugador por el dinero que gana y sí por su rendimiento. Entrenamientos, condiciones y moral. Todo cuenta y Fernando lo sabe muy bien”, cerró el italiano.